Nueve tecnologías emergentes para reducir las emisiones de CO2 en transporte por carretera
Con solo seis años para alcanzar los objetivos de reducción de emisiones establecidos en la Agenda 2030 a nivel global, expertos en movilidad sostenible están proponiendo diversas soluciones tecnológicas para la descarbonización. El transporte, reconocido por su fuerte impacto en la generación de gases contaminantes, aparece como uno de los principales sectores que necesitan modernizarse para disminuir su impacto ambiental.
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) son una llamada a la acción en todo el mundo para erradicar la pobreza, proteger el planeta y asegurar un futuro sostenible. Dentro de estos objetivos, la lucha contra el cambio climático ocupa un lugar significativo, y en este contexto, la reducción de las emisiones de CO2 en el sector del transporte es esencial para conseguirlo.
Como una parte sustancial de las emisiones globales, el sector del transporte se destaca como un área fundamental donde la innovación tecnológica puede generar un impacto significativo. En full&fast, nos hemos propuesto enumerar las tecnologías emergentes y las soluciones innovadoras que pueden ayudar a conseguirlo:
1. Vehículos Eléctricos (hidrógeno, enchufables, híbridos): Estos vehículos, tanto totalmente eléctricos como híbridos enchufables, representan un cambio fundamental al utilizar energía eléctrica en lugar de combustibles fósiles, reduciendo así las emisiones de CO2. Por su parte, los vehículos de hidrógeno, también considerados eléctricos, emplean este recurso para producir electricidad y generan como residuo de vapor de agua en lugar de dióxido de carbono.
2. Baterías de mayor capacidad en el mismo volumen y peso que las actuales: El desarrollo de baterías más eficientes y asequibles está impulsando la autonomía de los vehículos eléctricos, facilitando su adopción a nivel masivo. El siguiente salto tecnológico y ola de vehículos eléctricos se basará en las baterías de estado sólido y vehículos híbridos con autonomías en eléctrico en torno a los 100km.
3. Celdas de combustible de hidrógeno vs baterías: Con el potencial de revolucionar el transporte pesado, los vehículos impulsados por hidrógeno ofrecen una solución de cero emisiones locales, tan solo vapor de agua. En cambio, este tipo de tecnologías presentan ciertas limitaciones, entre otras:
- Potencia de salida de la celda de combustible, es limitada y necesita incluir una batería que almacene la energía generada para proporcionar una salida máxima. Eso significa que necesita aún más espacio para su instalación.
- La eficiencia energética general del sistema es muy pobre porque se necesita mucha electricidad para dividir el agua en hidrógeno, distribuirla en estaciones de combustible y convertirla nuevamente en electricidad, frente a otras alternativas como las baterías, cuyos niveles de sofisticación y avances permiten ya que camiones eléctricos de grandes marcas cuentan con hasta 500km de autonomía real.
No obstante, el hidrógeno verde se posiciona como una opción prometedora para el sector naval y sin duda para la industria, donde su uso ya es habitual, si bien ahora se busca su obtención de manera sostenible; y las baterías, por su parte, lo más adecuado para el transporte por carretera.
4. Transporte Autónomo: Los vehículos autónomos pueden optimizar las rutas y velocidades, mejorando la eficiencia de la conducción y del combustible, favoreciendo la reducción de las emisiones. Por ahora su uso prescindiendo del conductor se plantea para circuitos cerrados, como aeropuertos y espacios controlados; y como una figura de apoyo a la conducción para tráfico abierto, donde se seguirá precisando del conductor que deberá estar atento para intervenir.
5. Carreteras eléctricas, ¿son viables?: Esta innovación permite la carga continua de vehículos eléctricos en movimiento, lo que podría transformar la infraestructura de transporte actual. Sin embargo, presentan poca viabilidad económica y de eficiencia, frente a los cargadores fijos presentes ya en muchas carreteras y ciudades. Electrificar carreteras para llevar a cabo una recarga dinámica inductiva (Wireless como los teléfonos), según avanzan los vehículos por carretera, no sale rentable. Hasta ahora los proyectos pilotos que se han montado en este sentido, han arrojado poca eficiencia económica y energética, frente a un cargador fijo/surtidor de energía. Además, esta carga inalámbrica consiste en la instalación de almohadillas de carga inductiva en las carreteras permitiendo que los vehículos carguen sus baterías mientras están en movimiento. Este sistema innovador opera mediante la transferencia de energía inductiva (IPT) entre un dispositivo instalado bajo el pavimento y otro integrado en el vehículo eléctrico.
6. Gestión de la movilidad inteligente: La optimización basada en datos y la gestión inteligente del tráfico prometen reducir la congestión y mejorar la eficiencia del transporte. Son cada vez más las organizaciones que apuestan por este tipo de tecnología. Por ejemplo, Orange, está muy metida en este tipo de analítica de datos, aprovechando que pueden ver toda la información del hábito de uso por estar hoy todo el mundo conectado a sus “antenas”. Tienen un par de consultoras que funcionan muy bien, vendiendo este dato trabajado a la administración para llevar a cabo un replanteamiento urbanístico. El ayuntamiento de Madrid y empresas como INECO ya lo ponen en práctica, y los resultados están siendo positivos.
7. Combustibles renovables: combustibles elaborados a partir de materias primas de origen orgánico (biocombustibles) o sintéticos, ofrecen una alternativa a los combustibles fósiles en vehículos convencionales. Son combustibles que siguen generando emisiones de CO2 en su combustión, pero el CO2 que se libera en su uso es igual al CO2 que ha sido retirado previamente de la atmósfera por la materia prima usada para su fabricación. Si quieres saber más acerca de los combustibles renovables o biocombustibles, continúa leyendo más en detalle en nuestro artículo: Combustibles renovables ¿realidad o etiqueta?
8. Vehicle to Grid (V2G): el vehículo eléctrico con capacidad para verter energía almacenada en su batería a la red eléctrica. Esta es una de las base de las ciudades inteligentes del futuro para que lleguen a tener capacidad para ser energéticamente independientes gracias a la energía suministrada por vehículos eléctricos. Los vehículos eléctricos están preparados, no tanto los cargadores y tampoco la regulación.
9. Baterías para carga rápida: Esta tecnología innovadora proporciona soluciones flexibles y eficientes para el acceso a la carga de vehículos eléctricos, fomentando la transición hacia una movilidad más sostenible sin tener que esperar a la red eléctrica o incurrir en costes hundidos.
Aunque esta tecnología promete revolucionar la forma en que recargamos nuestros vehículos eléctricos, es importante tener en cuenta que no es adecuada para todos los vehículos ni para todos los trayectos. Veremos que resultados arrojan estas propuestas que tienen como objetivo reducir el nivel de CO2 generado por el sector del transporte y que camino toma el mercado de la movilidad sostenible.
full&fast: Pioneros y en evolución constante hacia un servicio adaptado e integral
En nuestra misión de impulsar la transición hacia una movilidad sostenible, seguimos comprometidos en ofrecer flexibilidad y potencia a todas las empresas que deseen caminar por la electrificación de sus vehículos eléctricos.
Nuestro objetivo es claro: contribuir activamente a la reducción significativa de las emisiones de CO2 en el transporte, alineándonos con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y marcando el camino hacia un futuro más respetuoso con el medio ambiente.
¿Buscas una instalación de punto de recarga de vehículos eléctricos confiable, segura y rentable? ¡Estás en el lugar correcto! full&fast… ¿Hablamos?
¡Mira donde aparecemos!
