La transición hacia vehículos eléctricos (VE) no sólo implica cambiar el tipo de propulsión de los vehículos, sino también repensar cómo se gestiona la energía. Una de las soluciones más innovadoras para mejorar la eficiencia y la sostenibilidad de estos vehículos es el almacenamiento energético.
En este artículo, exploraremos cómo esta tecnología potencia los beneficios de los vehículos eléctricos y cómo las soluciones de almacenamiento están transformando la recarga de estos vehículos.
Energía autónoma y sostenible: Microrredes (Microgrids)
Las microrredes son sistemas energéticos locales que permiten el funcionamiento independiente o complementario de la red eléctrica principal. Estas microrredes están formadas por recursos energéticos distribuidos (DER) como paneles solares, turbinas eólicas y sistemas de almacenamiento energético.
En el contexto de la recarga de vehículos eléctricos, las microrredes permiten gestionar la energía de forma autónoma, asegurando el suministro constante y eficiente de energía renovable en estaciones de recarga de vehículos.
Beneficios del almacenamiento energético para vehículos eléctricos
El almacenamiento energético ofrece una variedad de beneficios clave, como la integración eficiente de energías renovables, lo que permite por ejemplo la generación distribuida ilimitada, y contribuye a la estabilización de la red eléctrica, además de reducir costos operativos, retrasos y cortes.
¿Cómo funciona? Almacena energía durante períodos de baja demanda y la libera cuando la demanda es alta, mejorando la resiliencia del sistema y optimizando el consumo energético, de este modo también se logra ahorrar en la factura de la luz.
Gracias a los equipos de almacenamiento de energía la transición hacia fuentes de energía más limpias son más sencillas/viables, reduciendo la dependencia de los combustibles fósiles y las emisiones contaminantes, lo que contribuye a un sistema energético más sostenible, eficiente y flexible. El almacenamiento energético es esencial para maximizar el uso de la energía, especialmente en el sector de la movilidad donde cada vez la demanda de los vehículos eléctricos es mayor, y con ello, la potencia necesaria para una recarga rápida.
Optimización del consumo de energía
El almacenamiento energético permite almacenar la energía cuando está disponible a un precio más bajo y liberarla cuando más se necesita. Esto no solo reduce la factura de la luz, sino que también optimiza la eficiencia del consumo de energía de los vehículos eléctricos. Además, al almacenar la energía en momentos de baja demanda, se evita sobrecargar las redes eléctricas y mejora la estabilidad del sistema energético, evitando cortes o sobrecostes por exceso de demanda.
Este tipo de gestión energética inteligente asegura que el consumo de los vehículos eléctricos sea eficiente y económico, especialmente en momentos de alta demanda.
Integración con energías renovables
El almacenamiento energético facilita la integración de energías renovables como la solar y/o la eólica en el sistema de recarga de vehículos eléctricos. Estas fuentes de energía son intermitentes, lo que significa que no siempre están disponibles cuando se necesitan. Con las soluciones de almacenamiento de energía renovable , como las baterías, podemos almacenar el exceso de energía renovable durante el día y usarla para recargar vehículos por la noche, contribuyendo a una red energética más sostenible y resiliente.
Del mismo modo, se logra la generación distribuida de energía ilimitada y constante. Energía ininterrumpida con fuentes renovables, almacena la energía generada y se consume cuando se necesite, sin una dependencia constante.
Soluciones de almacenamiento energético disponibles
Existen diversas tecnologías de almacenamiento de energía eléctrica a gran escala que están impulsando la eficiencia y la sostenibilidad en el sector. A continuación, destacamos algunas de las soluciones más relevantes para una electrolinera y la recarga de los vehículos eléctricos.
Baterías de segunda vida
Las baterías de segunda vida son una de las soluciones más prometedoras para el almacenamiento energético. Estas baterías provienen de vehículos eléctricos que han alcanzado el final de su vida útil en cuanto a rendimiento para el vehículo, pero todavía tienen capacidad para almacenar energía de manera efectiva. Reutilizarlas para almacenamiento reduce el desperdicio de materiales, disminuye la demanda de nuevas baterías y ofrece una solución económica para las estaciones de recarga.
Sistemas de almacenamiento a gran escala
Los sistemas de almacenamiento a gran escala son ideales para gestionar grandes volúmenes de energía. Se utilizan en estaciones de carga de vehículos eléctricos, tanto públicas como privadas, para asegurar que haya suficiente energía disponible cuando se necesita.
Estos sistemas son capaces de almacenar energía durante las horas de baja demanda y liberar la energía almacenada durante las horas de alta demanda, equilibrando las cargas y optimizando la red eléctrica. Por ejemplo, en una flota grande de vehículos eléctricos, es una de las opciones más óptimas.
Cómo el almacenamiento energético potencia la eficiencia de la recarga
El almacenamiento energético no solo mejora la gestión de la energía a nivel global, sino que también mejora la eficiencia de la recarga de los vehículos eléctricos.
Gracias al almacenamiento, es posible gestionar el flujo de energía de manera más eficiente, asegurando que los vehículos se recarguen con energía de fuentes renovables, cuando los costos son más bajos, y sin generar picos de demanda en la red eléctrica. Esto no solo hace que la recarga sea más económica, sino también más sostenible.
El almacenamiento energético es una herramienta clave para mejorar la eficiencia, sostenibilidad y rentabilidad de la recarga de vehículos eléctricos. Al integrar tecnologías como las baterías de segunda vida y los sistemas a gran escala, podemos avanzar hacia una red energética más inteligente, limpia y eficiente.
Escríbenos a info@fullandfast.com para hablar de cómo nuestras soluciones de almacenamiento energético pueden ayudar a optimizar tu infraestructura de recarga de vehículos eléctricos y contribuir a un futuro energético más sostenible.